Voluntarios de DYA salvan una vida

Estimados amigos de DYA Zaragoza, esta mañana dos miembros de nuestra asociación sin ánimo de lucro han tenido una de las experiencias, que dentro de la gravedad del suceso, resultan más gratificantes en la labor de un voluntario sanitario; “Salvar una vida”, siendo conscientes que de no haber sido por su presencia, el resultado habría sido fatal.

En torno a las 10:45 de hoy mientras se encontraban haciendo gestiones en la Central de DYA Zaragoza, situada en las dársenas de la Estación Central de Autobuses, nuestros compañeros Ángel Hernández (Presidente de DYA Zaragoza) y Oscar Marco (Voluntario de DYA Zaragoza) han sido requeridos de urgencia por el servicio de seguridad de la Estación.

Al parecer una persona se había desplomado en las dársenas, quedando inconsciente. Una vez que han llegado junto a él, han podido comprobar que se encontraba en parada cardiorespiratoria, por lo que rápidamente han comenzado las maniobras de reanimación cardiopulmonar.

Mientras Ángel Hernández realizaba la reanimación manual, Oscar Marco, acudía con un desfibrilador semiautomático de nuestra Central, siendo colocado simultáneamente a la reanimación manual. Tras dos descargas consecutivas la víctima ha recuperado pulso y respiración, siendo estabilizado hasta la llegada de la ambulancia medicalizada UME del 061, quienes se han hecho cargo del paciente ya estabilizado y lo han trasladado con la máxima urgencia al Hospital Miguel Servet.

Datos del Paciente:
Nombre: Todov Apellido: Ivanov Edad: 59 años

Según hemos podido saber después, esta persona era el conductor del Autobús de la empresa DARY que en esos momentos salía con destino a Bulgaria (Rumanía), según parece, cuando iniciaba las maniobras para salir de la estación con el pasaje completo, ha comenzado a sentirse indispuesto, por lo que ha detenido el autobús cruzado en la estación y tras bajar del mismo ayudado por los pasajeros se ha desplomado.

Un cúmulo de casualidades han querido hoy estar de lado de Todov, si esto hubiera sucedido pocos minutos después, ya en carretera, podríamos hablar de un accidente con muchas víctimas, del mismo modo, el destino ha querido que hoy se encontraran en nuestras instalaciones estos dos voluntarios, que han podido, gracias a su preparación y experiencia, así como a la inmediata reacción del personal de seguridad y tráfico de la Estación, tener la oportunidad de salvar una vida.

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